Tizayuca, Hgo.- El municipio de Tizayuca se posiciona como un centro de transformación artística y cultural con el lanzamiento del proyecto de arte público monumental: “El Mictlán, la fórmula alquímica de la transmutación”. Esta obra de arte de instalación, dirigida por Wilbert Medrano, titular de la Escuela de Artes Municipal en conjunto con sus alumnos, se presenta en la Plaza Himno Nacional con el propósito de vincular profundamente la cultura prehispánica con las tradiciones del Día de Muertos y, más importante aún, de brindar los espacios adecuados para que los artistas locales demuestren su talento. El proyecto no es una ofrenda tradicional sino una obra tridimensional que pretende dejar una profunda reflexión basada en la cosmología mexica y la transmutación del cuerpo humano.
La presidenta municipal de Tizayuca, Gretchen Atilano, destacó la importancia de este evento para el desarrollo, la identidad local y el impulso al talento local. “Este año buscamos que la Plaza Himno Nacional sea el escenario perfecto para la transformación artística y cultural. Queremos hacer visible que en nuestro municipio existe el recurso humano y el talento para implementar proyectos de esta magnitud. Las y los tizayuquenses van a disfrutar de algo más allá de lo tradicional, algo que rescata y fomenta un tesoro cultural”, expresó la edil, reforzando que se están abriendo los espacios a los artistas locales para formar parte activa de las festividades, proporcionando una plataforma digna para expresar su arte y dejar un legado.
La monumental instalación es, de hecho, un examen evaluativo para cerca de 15 estudiantes de arte del municipio, cuyas edades fluctúan entre los 8 y los 60 años. Estos jóvenes y adultos, que asisten a la Escuela de Artes Municipal, deben probar su capacidad para que “el pensamiento sea capaz de ser creador”, trascendiendo la habilidad técnica, afirmó Wilbert Medrano.
El proyecto representa los nueve niveles del Mictlán, escenificando la descomposición del cuerpo humano en cuatro años y el tránsito del alma a través de etapas como la negación de la muerte, hasta el encuentro con los dioses Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl. Con cerca de 10 maquetas que recrearán las escenas de los niveles, la obra busca que la gente conozca sobre la distinción entre el Día de Muertos prehispánico y el tradicional Día de Muertos.
De acuerdo con sus creadores, el diseño arquitectónico de la Plaza Himno Nacional, con sus tres plazas, es crucial, ya que representa intencionalmente las tres etapas del desarrollo del ser humano: nacimiento, adultez y muerte. El público se convierte en una parte biológica viva de la obra, pues la instalación está diseñada para que el visitante se mueva como la sangre por una arteria, obligándolo a transitar entre los niveles y a sumergirse en la cosmología mexica, la instalación obligará al visitante a reflexionar sobre la muerte, utilizando elementos como telas y cráneos sin forma para simbolizar que “el espíritu no tiene forma, es informe”.
Con este proyecto la administración municipal de Tizayuca involucró a herreros, electricistas y carpinteros de áreas municipales; así mismo, busca acercar a la población al tesoro cultural heredado de nuestros antepasados que debe ser fomentado. La población podrá disfrutar de esta obra de arte de instalación en Plaza Himno Nacional durante los siguientes días.














