Emiliano Zapata, Hgo. – Obreros, transportistas y mineros del municipio de Emiliano Zapata mantienen una suspensión de actividades en protesta por una serie de abusos laborales y falta de pagos por parte de la empresa de capital chino Time Ceramics, dedicada a la producción de porcelanato. Las denuncias abarcan despidos injustificados, agresiones físicas, incumplimiento de contratos, violaciones a los derechos laborales y posibles daños ambientales.
Los trabajadores, respaldados por sindicatos y colectivos locales, denunciaron que la empresa lleva más de cuatro meses sin realizar los pagos acordados. Aunque en algunos casos se han hecho depósitos parciales de hasta un 30%, la mayoría de los afectados siguen sin recibir su salario completo. Además, los trabajadores aseguran que cuando reclaman el pago completo, la empresa condiciona su liquidación a cambio de la renuncia voluntaria, negándoles cualquier derecho a una indemnización justa.
Uno de los testimonios más crudos fue el de José David Miranda Espinosa, quien relató que fue agredido físicamente por un trabajador de origen chino tras un incidente en la obra. Posteriormente fue obligado a firmar su renuncia bajo presión, sin explicaciones claras ni acceso a su supuesto finiquito.
“No hay contratos, nos piden firmar minutas que no garantizan nada, y los precios que ellos mismos fijan por tonelada cambian arbitrariamente”, denunció un proveedor de minas, quien aseguró que incluso les exigen cuotas irregulares de hasta un peso por tonelada, sin justificación.
El problema no solo afecta a los obreros. Transportistas que mueven el material desde las minas hasta la planta también denunciaron pagos pendientes, manipulación de los precios del flete y competencia desleal por parte de operadores foráneos. Aseguran que los trabajos debían ser para la gente de Emiliano Zapata, pero la empresa ha traído unidades de otros estados que operan con tarifas más bajas, despojando a los locales de sus fuentes de ingreso.
Además de los abusos económicos y laborales, hay preocupaciones ambientales. Según relataron los manifestantes, los residuos químicos generados en la planta son almacenados en condiciones inadecuadas y presuntamente quemados por las noches. También señalaron que los desechos sólidos son llevados a tiraderos clandestinos, lo que podría representar un grave riesgo para el medio ambiente.
La empresa, que emplea en su mayoría a personal extranjero, ha incumplido acuerdos establecidos con las autoridades locales, como aquel que establecía que por cada trabajador chino debían emplear a cinco mexicanos. “Hoy apenas hay un 15% de trabajadores mexicanos, cuando la ley establece que los extranjeros no deben superar el 10%”, expresaron los inconformes.
Los trabajadores aseguran que no levantarán el paro hasta que se firmen contratos formales, se regularicen los pagos y se respeten las condiciones laborales y ambientales establecidas por ley. Mientras tanto, la empresa continúa operando con material previamente suministrado, pero ya no recibe nuevas cargas, pues transportistas y mineros han bloqueado el acceso a más insumos.
“Nos han pisoteado en todos los sentidos, pero ya no vamos a permitir más abusos. Estamos unidos y no vamos a ceder hasta que se respeten nuestros derechos”, concluyeron.