Pachuca de Soto.- Los intensos combates en Sudán en los últimos días han frustrado las esperanzas de una transición pacífica a un gobierno civil a partir de diciembre de 2022.
Los ejércitos leales a dos generales rivales han estado luchando por el control del país desde el 15 de abril, el último capítulo de la agitación provocada por el derrocamiento del presidente Omar al-Bashir en 2019.
Y como suele ser el caso, los civiles son los que más han sufrido, con muchos muertos y cientos de heridos.
Los enfrentamientos entre el ejército sudanés y las fuerzas paramilitares se intensificaron cuando las organizaciones médicas y varios testigos presenciales denunciaron ataques militares dirigidos contra instalaciones médicas.
Posteriormente, ambas partes negaron haber bombardeado el hospital en declaraciones a CNN.
Mientras tanto, las autoridades extranjeras rescataron embajadas y ciudadanos atrapados en los combates mortales, incluso cuando muchos sudaneses cayeron en condiciones cada vez más terribles.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el conflicto ha causado más de 420 muertos y 3.700 heridos. La situación humanitaria local se está deteriorando rápidamente, sin acceso a servicios médicos, muchas personas sin comida ni agua, y repetidos altos el fuego sin efecto.
Esto es lo que necesita saber sobre el conflicto en Sudán.
La lucha por el poder está en el centro de la confrontación
En el centro del conflicto había dos hombres: el líder militar sudanés Abdul Fattah al-Burhan y Mohammad Hamdan Dagalo, comandante de la Fuerza de Apoyo Rápido (RSF) paramilitar.
Sudán no es ajeno a los disturbios
El impacto de la expulsión de Bashir no se puede exagerar. Como las protestas populares causadas por el aumento de los precios del pan les hicieron caer, enfrentó la historia de casi 30 años en el estado.
RSF es un pasado controvertido
Las fuerzas de apoyo rápida son el cuasi más importante de los grupos militares en Sudán, y su líder Dagalo rápidamente llegó al poder. Estos dos rivales tienen mucho en común
Burhan era esencialmente la cabeza del sultán. Burhan era el inspector general del ejército cuando Bashir fue derrocado.
Su carrera es casi similar a la de Dagalo.
También se hizo famoso por su papel en los días oscuros del conflicto de Darfur en la década de 2000, cuando se cree que los dos se conocieron por primera vez.
Sudán se enfrenta a un futuro incierto
No quedó claro de inmediato cuándo y bajo qué circunstancias terminaron los enfrentamientos. Ambos bandos reclaman el control de áreas clave y los combates han estallado en todo el país, lejos de la capital, Jartum.