El color blanco es lo primero que veo, es terriblemente blanco, no hay una mancha, ni una línea, el cuarto está cubierto del mismo color, no hay ventanas, pero si hay una puerta.
¿Qué hago en este lugar? No tengo idea.
Me levanto de la camilla, el frío del suelo recorre desde mis pies descalzos hasta mi cuero cabelludo, escuchó mi corazón latir, siento el miedo invadir mi cuerpo entre más me acerco a la puerta, pero, no me detengo.
Giro la manija.
La puerta se abre sola, como si alguien la empujara suavemente desde afuera.
Una corriente de aire me golpea el rostro cuando miro por el pasillo, tragó saliva con dificultad, no sé en qué momento mi cuerpo está completamente fuera de la habitación, y esta vez no lo pienso, comienzo a correr, estoy por girar hacia el pasillo de la derecha, cuando una chica exactamente igual a mí pasa corriendo.
Nos miramos por un instante.
Estoy parada, al borde del final del pasillo, y ella continúa su camino mientras me mira, y entonces, una navaja enorme sale de la pared y la corta a la mitad a la altura de la cintura.
La sangre cae en mi rostro, está caliente, me llevo la mano a los labios y miro mis dedos con lentitud, la mano me tiembla, mis huellas están manchadas de rojo carmesí.
Clon 1459, eliminado— se escucha.
Miro a la chica, la sangre sale de su boca, se comienza a arrastrar hacia mí, yo retrocedo dando traspiés y caigo al suelo.
Soy yo.
La misma nariz, los labios, los ojos rasgados, el cabello corto.
De pronto se abre una compuerta en el suelo, y ella cae al vacío, se me escapa un grito. Me quedó ahí, aun cuando las compuertas se han cerrado, ¿cómo sé que si avanzo no se abrirán de nuevo y caeré? Me niego a pasar por ahí, prefiero quedarme encerrada en el cuarto.
Intento abrir la puerta, la manija no gira, intento con más fuerza y se oye un simple clic, pero no se escucha dentro de la habitación, sino al fondo de lo que resta del pasillo.
Giro mi rostro, lento.
Del suelo salen sierras para cortar madera, cada vez se acercan más a mí, y detrás las luces se van apagando, intento girar la manija de nuevo, pero no funciona, y cuando están dos metros de mí, me rindo y corro hacia la mancha de sangre donde se encontraba la otra chica, ¿o mi otro cuerpo?
Evito la derecha a toda costa, y me decido a seguir el mismo pasillo por el que voy, continuo hasta que me doy cuenta de que las sierras se han detenido hace algunos segundos.
Miro a mi alrededor, ahora el pasillo es más ancho, y en el suelo se observan unas baldosas que parecen haber sido quemadas con una especia de láser, me agacho y puedo notar que son profundas las marcas, un poco más allá puedo ver un pasillo a la izquierda y otro a la derecha.
Pero lo que termina por llamar mi atención es que al final del pasillo en el que me encuentro hay dos puertas de cristal que dejan entrar la luz del sol.
Antes de que pueda avanzar veo a una chica con el cabello al hombro salir del pasillo izquierdo, su bata está cubierta de sangre y tiene una mirada llena de miedo, aún peor que la mía, ella no es igual a mí, me mira un momento y comienza a caminar cojeando hacia las puertas de cristal.
Yo camino lento, mirando sus acciones, y entonces detrás de mí escucho como alguien cae al suelo, es otra chica, y cuando levanta el rostro puedo notar que ella si es igual a mí, pero con el pelo un poco más largo, ella me mira sorprendida, se levanta y se acerca a mí, estamos frente a frente, ninguna puede entender por qué somos idénticas.
Doy un paso hacia ella, pisando la misma baldosa, y entonces, se hunde, y suena una sirena, yo miro a mi alrededor y veo el enojo de la chica que salió del otro pasillo, comienza a caminar con rapidez hacia la puerta, y al comienzo no entiendo, pero me muevo por instinto hacia la misma dirección, miro detrás de mí buscando a la chica que es idéntica a mí, pero ella está parada, inmóvil y de pronto del techo salen luces de color rojo.
Al contacto con ella la parten en pequeños trozos, como si fuera solo papel, entonces corro con fuerza hacia las puertas de cristal, giro el rostro a cada paso para ver si las luces están cerca, paso a la chica con facilidad y abro las puertas de cristal, la luz me ciega.
Cuando mis ojos se adaptan veo un desierto, el lugar está rodeado por una rejilla de metal, fuera de ella hay al menos diez camionetas todoterreno, miro detrás de mí, la luz está por tocar a la chica, ella me mira desesperada y cae al suelo, la luz le pasa encima y desaparece cualquier rostro humano.
Clon 4678. Eliminado. Clon 3860. Eliminado. Clon 4999. Aprobado.
Siento un pinchazo en el brazo derecho, así que me reviso, hay un dardo lleno de un líquido rojo que se vacía con rapidez en mí, para cuando lo retiro, es demasiado tarde, caigo al suelo y lo que restaba del dardo se vacía en la arena caliente.
Tenemos que enviarla, es el prototipo adecuado.
No podemos enviarla aún, necesitamos que obedezca.
Abro los ojos, estoy recostada en una camilla de metal, me levanto en silencio, y me horroriza ver lo que me rodea, hay miles de mujeres dormidas con mi rostro, todas con una intravenosa que les pasa el líquido rojo.
Mis pies tocan el suelo, la mujer y el hombre discuten sobre enviar al prototipo a algún lugar, comienzo a correr hacia la puerta de metal que está detrás de mí, siento un fuerte mareo y resbalo, ellos me miran sorprendidos, el hombre se acerca y me apunta con una pistola, yo levanto las manos.
Recolecta su sangre después—dice la mujer, no se ha movido, solo observa a la lejanía.
Él dispara, y yo caigo al suelo, no puedo moverme, no respiro, pero aún puedo verlos, puedo mover los ojos.
Lástima, eras el clon perfecto—me dice el hombre al oído.