Miles de personas que exigían la liberación de los rehenes retenidos por Hamás desde el 7 de octubre llegaron a Jerusalén después de cuatro días de marchas tras enterarse de que dos prisioneros habían sido encontrados muertos en Gaza y exigir “respuestas” del gobierno israelí.
La marcha, compuesta por al menos 20.000 manifestantes, comenzó el martes a unos 60 kilómetros de Tel Aviv y llegó a Jerusalén portando banderas israelíes y retratos de los rehenes. La marcha culminará en la oficina del Primer Ministro Benjamín Netanyahu, quien enfrenta tensiones por sus reformas para otorgar más poder al poder ejecutivo antes de que el conflicto se intensifique.
Según el ejército, los comandos islámicos llevaron a unas 240 personas a Gaza. El foro de familias de rehenes y desaparecidos anunció por la tarde que “todo el Gabinete de Guerra” acogerá a las familias.
Las preocupaciones sobre la situación de los rehenes crecieron el jueves cuando el ejército informó haber encontrado el cuerpo del rehén Yehudit Weiss cerca del hospital Al Shifa en la ciudad de Gaza, diciendo que había sido “asesinado por terroristas de Hamas”. Ya se informó que el viernes se encontró el cuerpo de otro rehén, el soldado Noah Marciano, de 19 años. Hamás dijo el lunes que la mujer murió por fuego israelí, citando varias personas desaparecidas.