Se advierte al público en general sobre el uso de apitoxina en productos en sus diversas formas, tales como: soluciones sublinguales, inyecciones, cremas y ungüentos.
A la fecha, la Comisión no ha registrado ningún producto que contenga apitoxina como ingrediente, por lo que no se tiene constancia del contenido de materias primas (ingredientes) ni del proceso de fabricación. Además, no existen estudios que confirmen su calidad, seguridad y eficacia.
Cabe mencionar que su administración tiene efectos secundarios que van desde una reacción cutánea leve hasta reacciones alérgicas graves que pueden poner en peligro la vida.
Los eventos adversos incluyeron reacciones inmunitarias sistémicas, prurito o hinchazón local, hipersensibilidad, dolor, problemas de la piel y reacciones inespecíficas, así como anafilaxia aguda, síndrome de Guillain-Barré y daño permanente del nervio cubital.
Cofepris no recomienda comprar ni recomendar el empleo o consumo de productos que contengan apitoxina u otros productos que no cumplan con las normas de protección sanitaria vigentes.
La combinación de esta sustancia con otro medicamento puede ser perjudicial para la salud porque se desconocen las cantidades y concentraciones exactas de su contenido.