Pachuca de Soto.- Algunos se rieron de esta tragedia internacional desde el principio. El barco Galaxy Leader fue secuestrado por rebeldes hutíes en el Mar Rojo el 20 de noviembre y ahora los turistas abordan el carguero, toman fotografías, admiran la vista del océano desde su cubierta y, lo más importante, pisotean las banderas estadounidense e israelí.
Ése es el tema de este Disneylandia flotante frente a las costas de Yemen, donde los hutíes aprovechan la oportunidad para mostrar su apoyo al pueblo palestino frente a la furiosa guerra de Hamás contra Israel.
El buque, propiedad del empresario israelí Abraham Ungar y operado en asociación con una empresa japonesa, se encuentra actualmente varado frente a la costa del puerto de Salif en el Mar Rojo; los turistas llegan en barco y abordan el enorme barco para disfrutar de sus diversas instalaciones. Las banderas de las Bahamas que ondeaban en los barcos mercantes fueron reemplazadas por las banderas de Yemen y Palestina, un movimiento simbólico de los rebeldes.
Un vídeo del secuestro, que muestra a un helicóptero yemení abordando un buque de carga y a hutíes armados llevando a cabo el saqueo, ha sido reemplazado en la agenda internacional por selfies e imágenes de personas que visitan el extraño espectáculo. Sin embargo, la tripulación del Líder Galáctico permanece a bordo, un total de 25 personas de diversas nacionalidades, incluido el veracruzano Arturo Zacarías Meza.
Según el medio británico “Daily Mail”, el propietario del barco, Galaxy Maritime, afirmó en un comunicado que “la seguridad y el bienestar de la tripulación sigue siendo la máxima prioridad del propietario y de la gestión del barco y siempre hemos seguido las medidas apropiadas”.