Pachuca de Soto.- Ayer mismo, la NASA anunció que las muestras de asteroides recolectadas por la sonda OSIRIS-REX en una cápsula equipada con paracaídas sobre el desierto de Utah fueron devueltas a la Tierra por primera vez, poniendo fin a un viaje de siete años.
Estas muestras del asteroide Bennu podrían proporcionar información importante sobre la formación del Sistema Solar y el origen de la vida, ayudando a resolver misterios que han desconcertado a la humanidad durante siglos.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que el asteroide de 490.000 kilómetros de ancho choque con la Tierra dentro de 159 años, por lo que los científicos lo están observando muy de cerca e incluso han calculado la fecha en la que sucederá, que se cree que será el 24 de septiembre de 2182. .
Según estimaciones de la NASA, si Bennu golpea la Tierra, lo hará a 7.000 millas por hora y liberará 1.400 megatones de energía, al menos 24 veces más poderosa que el arma nuclear Tsar Bomba.
Afortunadamente, para el planeta, la NASA estimó que las probabilidades de que esto sucediera eran muy pequeñas, alrededor de 1 entre 2.700, pero la agencia estaba lo suficientemente interesada en el asteroide como para lanzar una misión de siete años para estudiarlo.