Ciudad de México.- El presidente Andrés Manuel López Obrador enfatizó en la necesidad de aportar recursos a países de América Latina y el Caribe como medida fundamental para contener la migración.
Sin embargo, dijo, el Congreso de Estados Unidos sí autoriza recursos a la guerra, más no a los pueblos de Latinoamérica.
“Hay una doble moral, un doble rasero: en Estados Unidos, el Congreso autoriza dinero para la guerra y no destinan recursos para apoyar a los pueblos pobres de América Latina y del Caribe, y de esta manera enfrentar el fenómeno migratorio. Nosotros ayudamos a resolver el problema hasta donde podemos”, explicó.
“Hay que atender el fenómeno migratorio ayudando a la gente pobre en sus lugares de origen para que nadie se vea obligado a emigrar”, reafirmó en conferencia de prensa matutina.
Destacó que el Gobierno de México, como un asunto humanitario, invierte 150 millones de dólares en programas sociales en países donde se registra mayor migración. La cantidad supera a lo que aporta Estados Unidos.
“A nosotros nos significa una inversión, que no gasto, de tres mil 500 millones de dólares atender el fenómeno migratorio”, puntualizó.
“¿Qué es lo que tenemos que buscar? Ayudar en lo económico, en lo social, resolver conflictos para bajar el fenómeno migratorio. Es lo mismo en cuanto a los problemas de violencia y de inseguridad y de narcotráfico. (…) Yo sostengo que la paz es fruto de la justicia, por eso insisto tanto en las causas”, agregó.
Con esta actuación, explicó el presidente, se busca evitar todo tipo de riesgos a los que se exponen las personas migrantes en tránsito por México.
“Es muy lamentable lo de los accidentes porque hay una red de traficantes de personas que tiene que ver también con transportistas y se contratan camiones inseguros, estos tráileres, estas cajas; hay muchas volcaduras, muchos muertos, muy lamentable esto que sucede. Ahora nosotros tratamos de mantener albergues y apoyarlos en el sur, porque también la travesía significa muchísimos riesgos, son los accidentes, pero también secuestros y asesinatos de migrantes”, señaló.
Recordó las diez propuestas presentadas a su homólogo estadounidense Joseph Biden en la conversación telefónica del pasado 3 de febrero. Las medidas priorizan la cooperación sin aplicar medidas coercitivas como la construcción del muro o la militarización de la frontera norte.
En el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional dio lectura a cada una:
Regularización de los mexicanos que llevan más de cinco años viviendo y trabajando honradamente en Estados Unidos.
Aprobar un presupuesto de 20 mil millones de dólares anuales para apoyar a países pobres de América Latina y el Caribe.
Suspender sanciones a Venezuela para aminorar los flujos migratorios.
Levantar el bloqueo a Cuba y no obstaculizar su desarrollo con el fin de reducir los flujos migratorios.
Mantener el programa de recepción de migrantes por vías legales, implementado por el actual gobierno de Estados Unidos.
No optar por construir muros ni cerrar la frontera porque no soluciona las causas de la migración ni resuelve el problema. Es pura propaganda política-electoral.
Combatir el narcotráfico y el consumo de drogas químicas como el fentanilo.
Regular la venta y exportación de armas de Estados Unidos a México.
Elaborar un plan de desarrollo conjunto para impulsar la industrialización y el comercio en el marco del T-MEC para continuar fortaleciendo a América del Norte como región en el mundo y definir una estrategia para la integración económica en todo el continente con respeto a la soberanía de cada país.
Reafirmar el compromiso de mantener relaciones de cooperación, amistad y respeto a nuestras soberanías.
“Eso ya lo tienen y se está trabajando y vamos a seguirlo haciendo y cuidamos a los migrantes; los cuidamos y no sólo el gobierno los cuida, los cuida el pueblo de México”, indicó.
El presidente López Obrador enfatizó que son buenas las relaciones con el gobierno de Estados Unidos y el presidente Biden.
A partir de este entendimiento se logró reducir el flujo migratorio en la frontera norte desde enero de este año a la fecha. Pasó de 12 mil personas promedio diario en diciembre de 2023 a cerca de 6 mil personas actualmente, apuntó.
Reconoció que el presidente Biden mantiene un trato de igualdad entre México y Estados Unidos e impulsa la recepción legal de migrantes a través de un histórico mecanismo que facilita el trámite de visas de trabajo o permisos humanitarios desde los países de origen.
“Sí, tenemos relaciones y ayudamos, claro que ayudamos porque somos países vecinos, tenemos 3 mil 180 kilómetros de frontera, hay 40 millones de mexicanos trabajando honradamente en Estados Unidos y no podemos desligarnos, romper. Además, económicamente nos ayuda la integración a los países, a los pueblos, pero sí tenemos problema de que los políticos estadounidenses de los dos partidos, en vez de atender las causas, se dedican nada más a hacer politiquería, a utilizar el tema migratorio con propósitos electorales y, como ahora hay elecciones, unos y otros ahí están hablando de que van a construir muros, que hay que militarizar la frontera, echándose la culpa”, argumentó.
Insistió en que México seguirá siendo un país libre, independiente y soberano en la toma de decisiones.
“Yo no me dejo presionar por nadie. México es un país independiente y el presidente de México actúa con libertad, no es un pelele de ningún gobierno extranjero. Eso ya pasó”, aseveró.