Pachuca de Soto.- La carrera hacia el Oscar ya ha empezado y, en lo que se refiere a animación, la principal parada que hay que hacer antes de llegar a la meta son los Premios Annie. Considerados unos de los galardones más prestigiosos del sector, sus decisiones nos ayudan a intuir hacia qué propuestas se decanta la industria. Y este año los Annie, han dado un empujón a ‘Nimona’, una cinta animada de Netflix, divertida e imaginativa, que se estrenó el pasado mes de junio, pero que no logró convertirse en el fenómeno que cabía esperar de ella. Nunca es tarde: estas nominaciones, y sobre todo si entra en las del Oscar, podrían cambiar su suerte y darle una segunda vida.
‘Nimona’ opta a nueve estatuillas en los Annie Awards, incluidas las de Mejor película, director, guion o diseño de personaje, siendo la cinta que lidera en número. ‘Spider-Man: Cruzando el Multiverso’, ‘Suzume’, ‘Tortugas Ninja: Caos Mutante’ y ‘El chico y la garza’ serán sus contrincantes en la categoría principal, mientras que la española ‘Robot Dreams’ podría conseguir el de mejor película independiente y cuatro más. Netflix puede estar contenta: con las nueve de ‘Nimona’ y otras películas suma un total de 28 nominaciones, superando de lejos a Disney con 8 o Pixar y Lucasfilm con 7 cada una.
Así es ‘Nimona’, la película de Netflix
La película ‘Nimona’ nos lleva hasta un reino medieval con tintes distópicos, el cual aúna el feudalismo con un estado futurista aparentemente idílico pero hipervigilado -algo así como un cruce entre ‘Tron’ y ‘Los cuentos de Canterbury-, donde hay coches voladores y armaduras de acero. Un lugar donde la seguridad está puesta en manos de caballeros descendientes de un linaje doble, con la excepción de Ballister Boldheart (Riz Ahmed), quien está a punto de ser nombrado con este honor, siendo el primer hombre plebeyo en lograrlo, para regocijo del pueblo y también de su novio Ambrosius Goldenloin (Eugene Lee Yang).
Pero en ese momento crucial para Ballister, se desata la tragedia: al arrodillarse ante la Reina, una pistola láser se dispara y la mata. Y él pasa de héroe a enemigo público número uno, convirtiéndose en un paria y un buscado criminal. Sin su trabajo, su novio y con la sociedad de espaldas, tendrá que ocultarse y será entonces cuando conozca a Nimona (Chloë Grace Moretz), una rebelde metamorfa que también tiene sus razones para vivir apartada y ocultarse y con muchas ganas de aventura. Al enterarse de la caída en desgracia del caballero, se ofrece como secuaz para ayudarle a recuperar su honor.
Estos dos amigos improbables se unen para demostrar la inocencia de Ballister, pero el afán de ella por arrasar con todo choca con la sensibilidad institucionalista de él. Pero, ¿se puede lograr un objetivo tan complicado, siendo siempre honorable o a veces hay que entrar, literalmente, como un rinoceronte rosa en una cacharrería y liarte a cuernazos?
Lo interesante de ‘Nimona’ es que se apoya en códigos y elementos clásicos para revertir las expectativas, transformando el viaje del héroe tradicional, llevando las tramas sentimentales a los laterales y poniendo la amistad en el centro. Y, sobre todo, construyendo un interesante relato sobre la identidad con una lectura queer muy lograda (además de tener personajes LGTB visibles). Y todo lo ello empujando la creatividad hasta lugares muy cautivadores, tanto en lo narrativo como en lo visual.