Juan Pablo II sabía de casos de pedofilia en Polonia antes de ser elegido Papa en 1978 y ayudó a encubrirlos, según un libro publicado ayer por un periodista holandés en la patria del Papa.
El periodista Ekke Overbeek pasó más de una década investigando archivos y entrevistando a víctimas y testigos, material que presenta en su libro de más de 500 páginas, Máxima Culpa.
En este país, las víctimas de abusos sexuales por parte del clero tienen miedo”, asevera el neerlandés.
Overbeek, que vive en Polonia desde hace más de 20 años, ya publicó un libro en 2013 con los testimonios de víctimas de sacerdotes pedófilos.
Muchos de los documentos de la nueva edición provienen de los archivos de la antigua policía secreta comunista, que algunos han criticado.
El periodista se defendió diciendo que “los archivos de la Iglesia Católica no están abiertos a los periodistas”. Overbeek agregó que comparó sus hallazgos con otras fuentes, incluidas víctimas y testigos del incidente.
Cuando Sadus se vio en apuros porque lo acusaban de abusar de niños, él personalmente lo ayudó a escapar de Polonia. Y puede decirse que le organizó una nueva carrera en Austria”.